Buenos días,

Ayer cuando llegué a casa a las 3 de la mañana me puse a escribir este post que se publica ahora, porque necesitaba gritar a los cuatro vientos que siento una gran pérdida…

Gabriel García Marquez ha fallecido en Jueves Santo como su Úrsula Iguarán, el personaje de Cien Años de Soledad que Gabo decía haber inspirado en su propia abuela, casualidad o no, el caso es que la tierra ha perdido a uno de sus grandes genios.

Los libros de Gabo me enseñaron a soñar, me enseñaron a creer que el amor lo podía todo, que no importa el tiempo que pase ni las personas que pasen, si el amor es suficientemente fuerte al final se abre camino.

El amor en los tiempos de cólera me dio fuerzas en momentos en los que no creí tenerla y me dió esperanza cuando era lo único a lo que podía aferrarme. Gabo tenía el poder de escribir y hacerme creer a ciegas en lo que él escribía, sus novelas eran desgarradoras, de esas que tienen amores infinitos y pasiones desnordantes, pero es que además Gabo era periodista, para él, el oficio más bello del mundo.

Gabo escribió…

Me parece lo más bonito que pueden decirle a una mujer, por eso y muchas cosas como esta cuando hoy me he enterado de que al final la parca se lo había llevado, me he sentido triste porque no habrá mas textos nuevos, y estoy convencida de que no los he leído todos pero lo haré y entonces no habrá más…

En cualquier caso, y gracias a Gabo seguiré como Florentino pensando que el amor es algo que uno siente dentro y que no importan con quien se comparta la vida ni cuantos años, al final ese amor verdadero siempre fluye y te hace llegar a la otra persona aunque 50 años os hayan separado. La fortaleza del amor verdadero rompe barreras.

Un hombre polémico con ideas claras y muchos años de literatura a sus espaldas, premio Nóbel, ciudadano, hombre y curioso hasta el final, yo me quedo con una imágen de hace un tiempo en el que parece hacerle la burla a un mundo que no le hace ningún caso y a veces debería….

¡HASTA SIEMPRE GABO!